El autobús nos deja en la zona conocida como Lugano-Paradiso. Allí andamos hasta la estación del funicular.
No cogemos ida y vuelta, porque tengo otra idea en mente
El funicular a monte San Salvatore
En la estación superior.
Sendero, hacia los miradores.
Vista del lago Lugano, brazo hacia el NE, este acababa en territorio italiano.
Interior de la iglesia, como no, de San Salvatore
Se podía subir a la terraza de la iglesia. Espectacular vista del lago. Parecía un estrecho y alargado fiordo.
El pequeño lago di Muzzano. Detrás el aeropuerto de Lugano.
Más fotos de familia
Monte dei Pizzoni, dominando la ciudad de Gandria.
Zoom sobre Gandria
Vistas hacia el brazo sur del lago y Melide.
Mi idea, bajar andando de la cima hacia Melide, por un bonito y fácil sendero.
El sendero va por dentro del bosque y baja con rapidez. Un bonito y fácil paseo.
Eva decía que esto era una veta de oro.... sí.... del que cagó el.... jijijiji
Llegamos al final del camino. Una primera urbanización de chalets, bajo el propio monte
Con extraordinarias vistas al lago.
Un poco más abajo el pequeño pueblito de Ciona
Santa Maria delle Grazie
Cruce de caminos. Cogemos dirección Carona.
Ummmm... invita a hacer una parada. Hamaiketako... bueno no sé ni que hora era...
Via Canavaa, entrando a Carona.
CARONA
Iglesia de San Jorge y Andrea. Todo muy italiano.
De nuevo en otro sendero, ya en el último tramo de bajada.
Bajada por el sendero
Capilla en la bajada a Melide.
Pequeño descanso... el calor apretaba pese a bajar en sombra
Celebración de Eva, con el Monte San Salvatore al fondo
MELIDE
Iglesia de Santa Giulietta y san Quirico.
Iglesia con el Monte San Salvatore
Comimos a la orilla del lago. Y yo aproveché para bañarme en sus sorprendentemente cálidas aguas (me esperaba que estuviese mucho más fría).
Helado antes de proseguir.
Entramos a un parque de miniaturas, donde estaban representados diferentes monumentos de Suiza en miniatura. Muy logrado.
SWISS MINIATUR PARK
Mi idea ahora era ir a Morconte. También cabía la posibilidad de haber ido andando, pero se hubiera alargado mucho. Y la combinación en bus (no había tren), hacía que tuviesemos que volver de noche. Así que decidimos volver a Lugano.
LUGANO
Estatua de Guillermo Tell
Parque Cívico
Villa Ciani
Atardecer en Lugano.
De vuelta al hotel, como no, acabó lloviendo. Para mañana dan más lluvias, pero vamos a otra ruta de castillos.
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