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domingo, 16 de marzo de 2014

PASEANDO POR LA SIERRA DE BADAIA

Pues ya le tocaba a la sierra de Badaia (también llamada sierra Brava de Badaia). Aprovechando estas semanas de buen tiempo, y tras las obligaciones de los carnavales  de la semana pasada, esta tocaba monte.

La sierra de Badaia es la que queda al este del paso de Subijana, el más imporntante acceso entre la cornisa cantábrica y la meseta castellana en la zona del País Vasco. Por el estrecho desfiladero que ha horadado el río Bayas entre esta sierra y la de Arkamo al oeste, discurre la A68. Tiene un recorrido N-S, y es una zona de transición entre el clima atlántico de la franja costera y el mediterraneo, notándose en la cubierta vegetal.

La morfología es similar a la de la Sierra Salbada y la vecina Arkamo, y tantas y tantas otras de la cordillera contábrica oriental: una amplia meseta de perfiles suaves y redondeados con las típicas formaciones kársticas de la caliza  dominante (dolinas, simas, etc...), donde abundan pastos y algunas manchas boscosas. Una meseta defendida por una imponente muralla rocosa, aparentemente inexpugnable, pero salpicada de varios pasos o portillos que permiten un acceso fácil y cómodo a la meseta superior. La idea es realizar una pequeña ruta por la meseta, subiendo por un portillo, el de Azkárate, al sur, y bajar por alguno de los que quedan más al norte, Eza, o si me da tiempo, Tortura. Entre medias visitar alguna de las cimas de la sierra, siendo el Oteros, su máxima altura, el principal objetivo.

Decir que en esta sierra se encuentra uno de los principales parques eólicos del País Vasco. Afean el paisaje, y han hecho necesaria una amplia red de pistas por toda la meseta superior. Pero no seré yo quién me posicione en contra de una forma de generación eólica limpia e infinitamente más ecológica que otras. Nada  que ver con la aberración del fracking que pretenden instalar en esta zona importada de los EEUU, un sistema de extración de gas natural cautivo en la caliza, y que consiste en fracturar la roca con sustancias químicas, que en primer lugar contaminan el suelo, y en segundo lo desestabilizan. Todo el valle está salpicado de pancartas y carteles en contra de esta práctica. Indudablemente los molinos son feos, y pueden causar estragos en las migraciones de las aves, pero nada tienen que ver con la muchisimo más agresiva, técnica del fracking.

Voy a iniciar la ruta en el enclave de Zuazo Kuartango. Para ello tras salir de la autopa en Altube, voy en dirección a Izarra, desde donde, por la A-3314, alcanzo el enclave de Zuazo Kuartango:



Son las 9 cuando comienzo a andar. La calle asfaltada, continua por una pista, que sale justo detrás de la última casa del pueblo, y para atrevesar un caño a los pocos metros.


Un poco más adelante giro por otra pista a mi derecha.


Abandonando la principal poco antes de una valla (el desvío estaba bien señalizado por un hito)


Todavía hace mucho frío, y la niebla cubre el valle.


Nueva valla


Y repetidor


Un poco más adelante, un cruce, que tomo de nuevo a la derecha. Nuevamente está bien "hitado"


Y empiezo a ganar altura saliendo de la niebla y superandola


Avanzando hacia los paredones que desde aquí parecen infranqueables.


El camino es bonito, y a ratos atraviesa un bosque mixto.


Camino del paso, o portillo de Azkárate, uno de los muchos que permiten el acceso a la meseta superior de la sierra


A medida que gano altura, el sendero se va estrechando


La primavera empieza a hacer acto de presencia


Camino del portillo de Azkarate


La niebla del valle se va deshaciendo a medida que avanza el día


Vista atras desde un recodo en el camino.


Portillo de Azkarate.


El portillo de Azkarate da paso a la meseta superior, donde existe uno de los principales parques eólicos del pais vasco



Caminando por la meseta superior de la sierra, camino del Oteros.


Macro de una de los flores amarillas que salpicaban la meseta


Avanzo hacia lo que yo creía que era el Oteros


Pero resulta ser el ALTO CONCHA (999 MTS)


Ji, ji ji, vaya metedura de pata. Pero resultó ser má interesante que el Oteros en sí. El descenso hacia el nordeste por esta brecha:


Vista atrás


Y allí delante el Oteros


OTEROS (1036 MTS)




Mirada hacia el Gorbeia


Y hacia el Alto Concha


Pano desde la cima de Oteros:


 Y hacia otra cima, que parecía tener un vértice geodésico (Lorritxo????)


 Y hacia allí voy. Y lo que creía que era un vértice, resulta que es un mojón doble, que marca la antecima oriental del Oteros


 Así que vuelvo a la pista para buscar el Lorritxo


El paisaje de la meseta es irreal, cuesto diemensionarlo, ya que los molinos le restan tamaño. Un montañero que me antecede, ayuda a captar las dimensiones


Me pasé el vértice de Lorritxo de largo. Una charca (pozo redondo), en una de las depresiones de la sierra. Al fondo el portillo de Azkarate por donde he subido.


Pero yo quiero ir en busca de otro portillo más al norte. Antes paso por la Casa de Juntas de Askegi.


Curiosa construcción, jalonada por cuantro monolitos rocosos, en cada punto cardinal.


No me entretengo mucho, porque voy a a andar justo de tiempo. Voy camino del portillo de Eza, sobre el enclave de Urbina-Eza, otro de los pasos a la meseta superior de la sierra. Allí al fondo se aprecia, custidiado por el Pikatxo Etxebarri


Bajando hacia el portillo de Eza.


Portillo de Eza


Pikatxo Etxebarri. Desde el portillo son unos pocos metros



PIKATXO ETXEBARRI (865 MTS)


Marinda, y sobre él, el pico Marinda


Desde el Pikatxo:


 Descendiendo hacia el portillo


Impresionante el paso cortado en la roca.


Nueva imagen del Marinda, de soberbio aspecto


El descenso no tiene pérdida, hasta llegar a esta valla, que hay que saltar, entrando en otro camino


Que me deja en la iglesia de Zuazo Kuartango, con un curioso campanario, independiente del edificio de la iglesia.


Ya solo queda bajar al pueblo donde he dejado el coche


Fuente lavadero, en Zuazo Kuartango


Interior


Excursión muy sencilla, de unos 16 kms y 500 mts de desnivel. La zona superior es una amplísima meseta, cortada por pistas utilizadas para el mantenimiento de los molinos. Ideal para bicicleta (vi varios ciclistas, más que caminantes). Los pasos de ambos portillos son espectaculares, pero sin ninguna dificultad. El tránsito por la meseta superior es un poco monótono en un paisaje de grandes  dimensiones, y sin apenas referencias, más allá de los propios molinos. Ojo en un día de niebla, porque además todo el conjunto se haya salpicado de simas y profundos pozos. Vi varias, casi todas señalizadas y protegidas. Pero además con niebla, la falta de referencias puede hacer complicado encontrar los portillos de acceso.

Croquis del recorrido sobre mapa del ign:


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