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sábado, 23 de julio de 2011

DE CAUTERETS AL PETIT VIGNEMALE

Tras haber subido al Perdido en 2008 y al Aneto el año pasado, me quedaba un gran macizo que conocer: el Vignemale. Ya el año pasado tenía pensado una salida por esta zona, pero al final no pudo ser. Este año, aprovechando una vez más el puente de Santiago, he diseñado una ruta de 3 días, para conocer lo máximo posible de este entorno. Al final, no se cumplieron los objetivos, debido a una climatología sorprendente para ser julio, pero es lo que toca este año. No obstante, el objetivo principal, que era conocer este macizo y alguno de los valles que lo rodean, y sobre todo, disfrutar de la montaña, se cumplieron sobradamente. En las próximas 3 entradas, comentaré cada uno de los días.

El viernes 22, después de comer, quedo con el Txaku, y nos vamos hacia la France, en este caso Luz Saint Sauver, que queda a unos 30 kms de nuestro lugar de inicio, Cauterets. ¿Por qué no dormir en Cauterets? Pues sencillamente porque no encontré ningún alojamiento a un precio "razonable" (sólo vamos a dormir una noche). El hotel, la residencia le Chili, básica, pero a mi me pareció más que recomendable. Justo a su lado una de las iglesias parroquiales de Luz


El sábado nos levantamos temprano, y a las 8 de la mañana estamos ya preparados en el parking de la Raillere, poco después de cruzar Cauterets, con la impresionantes cascada de Lutour como fondo


La mayoría de veces el recorrido al Vignemale desde aquí se inicia en el Pont d'Espagne, ya que se ahorran unos 500 mts de desnivel y calculo que unos 8 kms. El porqué de empezar en la Raillere, es que mi idea inicial es bajar el lunes por el valle de Lutour, y la única forma razonable de hacerlo es esta. Me recreo en la cascada:


En la Raillere hay varios aparcamientos, algunos de pago, otros no. Yo no sé si hice bien, pero lo deje en una zona de aparcamiento que hay a la izquierda de la carretera justo antes del desvío de carreteras hacia Pont dÉspagne y la Fruitere (valle de Lutour). El hecho es que a la bajada allí seguía. Antes de cruzar el puente, a la derecha sale un camino, indicado claramente como "route de les cascades". Este primer tramo es precioso, y para mi, mereció totalmente la pena el comenzar más abajo.

El torrente desde el comienzo del camino


El bosque que atravesamos me sorprendió por su exuberancia (y eso que somos del norte y estamos acostumbrados)


Una gran seta junto al camino. ¿Sería comestible? Si hubiese sido así, nos habría solucionado la comida de un día


Llegamos a esta primera cacada (Cascad d'Escane Gat, me parece)


El torrente baja con una fuerza tremenda, y en algunos tramos se encañona


Continuamos subiendo pegados al río


Nos encontramos con 0tra seta de tamaño considerable


Y, como no, algún macro


Continuamos transitando un bosque mágico, tapizado de verde y ocre



Otra cascada (creo que es la del Pas de l'Ours)


Tras esta última, llegamos a una zona donde el río pierde fuerza, y vamos por una zona con menor pendiente, pero no menos bonita


Donde continuamos admirando lo que el agua puede hacer


Y por fin llegamos al Pont d'Espagne a las 9:40; espectacular


El entorno del Pont d'Espagne es espectacular. Hay una serie de miradores que van ascendiendo hasta el edificio de la hotellerie. Merece la pena subirlos




Para continuar al lac Gaube, hay un telecabina que ahorra los 250 mts de desnivel. Nosotros vamos andando; para ello hay que cruzar a la orilla derecha del río (hemos venido en todo momento por la izquierda), bajar unos mts de carretera, y enseguida, se ve un camino que asciende en fuerte pendiente, y con un poste indicador al lac de Gaube. Este tramo nos llevó una hora, y a las 10:40, llegamos a la orilla del Lac de Gaube, donde aprovechamos para sacarnos unas fotos, en tan emblemático lugar



Y ahora sin bichos, que siempre son más bonitas, je, je


Continuamos por la derecha del lago. En este tramo me dio por las macros



Llegamos al fondo del lago sobre las 11 de la mañana (llevamos 3 horas andando)


Comienza una subida no excesiva. Aprovecho para seguir sacando afotos de toda planta que se lo merezca (los bichos no se dejaban y se escondían enseguida, sobre todo las marmotas)



Estamos subiendo por la margen izquierda del río. Llegamos a un puente, donde cruzamos al lado derecho; las vistas del lago desde el puente


El torrente, que baja con fuerza al lado del río


El camino sigue subiendo, y de pronto:


Sí, es él. Tengo que tirar de zoom, y las nubes no lo dejan ver con claridad, pero tenemos la primera imagen de la cara norte del Vignemale


Un poco más arriba, en el rellano de la cascada Darré Esplumouse, se deja ver en toda su dimensión (es un decir, porque las nubes entran y salen de forma continua):


A las 12:40 (4 horas y 40 minutos), llegamos a Oulettes de Gaube, donde el Vignemale se muestra en todo su explendor. Yo no puedo resistirme a fotografiarme con él


La típica imagen desde Oulettes (aquí sin bicho). Las fotos no hacen honor. La impresión al estar aquí es totalmente diferente; da la impresión de que toda la cara norte se va a desplomar encima de ti. De lo más espectacular que he visto en mi vida


Más cerca y sin casi nubes


Aprovechamos el refugio de Oulettes de Gaube para comer. Pedimos unos huevos con jamón que nos saben a gloria, y de postre un crêpe (alta cuisin francesa, y nunca mejor dicho porque nos lo sirven a 2150 mts de altura). El día está siendo irregular, las nubes entran y salen, pero el rato que estamos en el refugio, el sol pega, y aprovechamos para tumbarnos un rato después de comer, ya que vamos muy bien de tiempo. A las 2 de la tarde, y aunque el cuerpo nos pide más descanso y más sol, nos ponemos en marcha hacia l'Hourquette d'Ossoue.

El refugio desde las primeras lazadas del camino


Esta es la parte más penosa del camino, ya que se recorre un fuerte desnivel en medio de un terreno inhóspito. Además la niebla nos envuelve. Poco después del desvío al col d'Arraillé, Txaku pide una tregua, más por cansancio sicológico que físico, y nos tiramos en mitad del camino


Terreno totalmente inhóspito, en medio de la fantasmal bruma.


Txaku se recupera fácil (ha sido más el agobio que el cansancio en sí), y volvemos a tirar para arriba. Una vez superada la cota de las nubes, volvemos a tener vistas y dimensiones. Ante nosotros, a tiro piedra la cara norte del Petit, con su glaciar


Detalle del glaciar


A las 3 y media llegamos a l'Hourquette. Dejamos aquí las pesadas mochilas de travesía, y vamos a por el Petit Vignemale. El cabrito parece que está ahí mismo, pero no se puede subestimar. Son más de 3000 mts. Y por primera vez en el día en algún momento lo paso realmente mal. Es la angustia de querer llenar los pulmones y no poder, de sentir el corazón galopando, de tenerte que parar para volver a encontrar el ritmo adecuado. Finalmente a las 4 y cuarto de la tarde hacemos cima en el PETIT VIGNEMALE (3032 MTS)


Y aquí con el Pic Long como fondo


Mirando hacia Ordesa


La brecha y el Casco


El Midi


Otro par de fotos del mar de nubes desde la cima



La difícil cresta hacia los Chausenques y el pic Long


Después de más rato del que pensábamos en principio en la cima, bajamos para recuperar las mochilas. Me sorprendió encontrar aquí, a casi 3000 mts. de altura, alguna flor. Es sorprendente como progresa la vida, incluso en las condiciones más extremas



El refugio de Baysselance, que será nuestra casa los dos próximos días


Llegamos al refugio a las 5 y cuarto.


Tras asearnos, nos dispusimos a esperar a la cena que sirvieron a las 7 de la tarde (joer con los franceses, los españoles no estamos acostumbrados a estos horarios, por mucho que al día siguiente fuésemos a madrugar).

El domingo acometeríamos el Pic Long y alguna cima más de la corona que conforma el glaciar d'Ossoue, pero esa es una historia que contaré en la próxima entrega.

La jornada nos llevó 9 horas y cuarto, con una hora y cuarto para comer en Oulettes, o sea, 8 horas efectivas andando (estas con las típicas paradas cortas, fotos, etc...). Es una ruta sencilla, ya que en todo momento transita por camino balizado, y la ascensión al Petit Vignemale se hace andando por fuerte rampa. Pero es muy dura. En casi 20 kms de distancia hemos salvado 2000 mts de desnivel positivo (La Raillere está a 1048 mts) y unos 400 mts negativos (principalmente en la bajada del Petit), por lo que es necesaria una buena condición física.

Comenzar en la Raillere puede parecer una pérdida de tiempo, pero si se puede, no me queda más remedio que aconsejarlo: fue quizás la parte del camino (la llamada ruta de las cascadas) que más me gustó, y ello sin desmerecer el resto que es precioso. El día acompañó a medias, ya que las nubes entraban y salían de forma continua. Nada que ver con lo que nos esperaba los dos días siguientes, y que hasta cierto punto trastocaron nuestros planes de inicio.

3 comentarios:

  1. Coincido contigo, jornada larga y agotadora mentalmente en algunos momentos más que nada por llevar la mochila y lo que jodía el peso a los trapecios. En cuanto dejé la mochila, me liberé y me sentía ligero, je, je. El entorno muy chulo, el agua siempre te da alegría.

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  2. Gracias por tu reseña, me voy en una semana con esquís de travesía, espero que la pala final al petit vignemale pueda subirla.

    Un saludo!

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    1. Aupa Raul. Seguro que lo subes sin problemas. No me pareció que tuviese un inclinación excesiva. Eso sí, sufrí por la tralla del día, y por mis problemillas a partir de 3000 mts de altitud.
      Un saludo y suerte

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