Etiquetas

martes, 24 de agosto de 2010

RUTA VALLE DE ESTOS

Después de dos días cañeros a tope (Aneto y Posets), hoy nos lo queremos tomar con calma. Una excursioncita de 3 a 4 horas para estirar las piernas. Además el tiempo que anuncian es malo; muy malo. Y después de la calada de ayer, como que no hay ganas.

Finalmente decidimos subir al valle de Estós, que nos han dicho que es precioso, aunque la ruta no la tenemos clara. En principio la intención es subir hasta el refugio y luego ya veremos.

El acceso a la pista del valle de Estos no tiene pérdida. Está perfectamente señalizada en un desvío de la carretera que sube a Llanos del Hospital. Allí por pista de piedras se suben unos 200 mts hasta el aparcamiento donde se deja el coche.

Y empezamos a andar por la pista del Gr-11, y sin tiempo, empezamos a ver las primeras estampas preciosas del torrente que baja con una fuerza enorme.




En algunos lugares incluso hace una pequeña neblina por las gotas de agua que suelta el torrente



Hoy no hemos madrugado, y hemos empezado a andar a las 10:30 de la mañana. Tampoco es que importe, porque el día se presenta gris y lluvioso, aunque hoy no hay sorpresas, lo vienen anunciando toda la semana, y ya sabemos que nos vamos a mojar. La humedad que contiene el ambiente deja las plantas con una capa de humedad, y aprovecho para alguna macro



El valle de Estos es un valle tributario del principal de Benasque, cerrado por el N-NE por el imponente macizo de Perdiguero, y por S-SW por el no menos imponente de Posets. Precisamente hacia el SW del valle hay un serie de interesantes ibones que me han estado tentando, aunque el desnivel será importante, y aun no sé como vamos a responder.

Pronto llegamos al desvío hacia Perdiguero



Y enseguida llegamos a una curiosa fuente que mana sobre un tronco hueco



Una vez más el camino atraviesa un bosque encantado



Al poco hay que empezar a tomar decisiones: o subir al refugio o virar a la izquierda hacia el ibonet de Batisielle en primer lugar. Finalmente decidimos que está será la dirección que tomemos. En mi cabeza y con la ayuda del mapa, empiezo a dibujar una ruta semicircular.

Entre paisajes de ensueño alcanzamos un puentecito de madera sobre un torrente más



Agua, torrentes, verde por todas partes, lo mismo que estos dos días, pero aun más bonito. Esta ruta fue la más me gustó paisajísticamente, aunque le falto alguna ascensión; y eso pese al tiempo



A las 12:30, tras dos horas llegamos al ibonet de Batisielles. Es una charca pequeña, rodeada de vegetación, y de un profundo color verdoso. El paisaje con las agujas como fondo recuerdan a otros lugares más míticos, aunque no hace falta irse lejos para encontrarlos: basta con venir al Pirineo




La aguja de Perramó, ominipresente durante todo el recorrido



Aquí surge la duda, continuar al ibon grande de Batisielle, o a los ibones de Escarpinosa. En principio nos decidimos por la ruta más corta y menos dura, o sea, a Escarpinosa, aunque yo ya he dibujado mentalmente una circular, que nos lleve de Escarpinosa a los ibones de Perramó, y de aquí bordeando las agujas, bajar a los ibones de Batisielle para volver al ibonet de donde salimos (en el croquis de abajo, recorrido de puntos). Finalmente no lo hicimos por razones meteorológicas.

Comenzamos a subir hacia Escarpinosa, y llegamos a este vallecito (cada vez que llego a un rincón como este, me siento tentado de quedarme para siempre en estos lugares);



Y seguimos subiendo entre cascadas, torrentes, arboles, observados por imponentes agujas de roca. Es difícil no encontrar la belleza en estos parajes, y sentirse oprimido por lo que la naturaleza es capaz de crear




Y llegamos al ibon de Escarpinosa, con la aguja de Chuise como fondo, y con las nubes dandole un aspecto fantasmagórico. Empieza a llover.



Y por el otro lado del ibon la aguja de Perramó



Nos hemos refugiado debajo de unos tupidos abetos que nos protegen de la lluvia, que todavía no es muy fuerte, aunque se oye tronar a lo lejos. Nuevas estampas de este idílico rincón (otro más, y van...)




Y lo que hasta ahora ha sido lluvia ligera, se convierte en un chaparrón en toda regla. Pero chaparrón de verdad, de los que ni chaqueta de agua, ni gaitas, que te cala todo, vamos. Continuamos refugiados durante 20 minutos, y cuano parece que amaina un poquito bajamos hacia el ibonet; la ruta que había diseñado en la cabeza se va a la porra.

Llegados al ibonet, ha parado de llover, y aunque el día es muy inestable, decidimos (la verdad que decide Andrés más que yo, porque estoy un poco harto de mojarme, y además el cansancio hace mella) subir al ibón grande de Batisielles. Todo un acierto.

Según subimos nuevas imágenes espléndidas.




En medio de la dura ascensión (más dura que la anterior a Escarpinosa), nos encontramos con este habitante de la montaña. Posa con su colorida vestimente. Buff, que colores más pasados de moda, son demasiado fosforitos




No sé cuanto nos llevó subir aquí, pero la recompensa fue disfrutar del ibon en total soledad: fueron los momentos más solitarios y mágicos de la ruta de 4 días, con Andrés sentado a la orilla del ibón, y yo ascendiendo una colina para tratar de tener la mejor imagen del ibon. Al final hice lo que pude




Y aquí estoy yo, que creo que casi no salgo en ninguna



Las nubes continúan amenazando tormenta y lluvia, aunque no nos volvió a llover, así que no nos entretenemos demasiado, y bajamos siguiendo la misma ruta que nos ha traido aquí, aunque descubro nuevos lugares para inmortalizar paisajes y momentos que me parecen hermosísimos







A las 5 de la tarde, después de 6 horas y media estamos de vuelta en el coche. Vaya con la jornada de descanso, je, je, je...

Ruta sencilla, sin complicaciones de ningún tipo, pero con fuerte desnivel (al final con subidas y bajadas, calculo unos 1000 mts de desnivel positivo, que no está nada mal). Camino marcado, pero muchas zonas rocosas, que se pueden complicar, y más como fue el caso, con el suelo mojado. De todas formas es apta para toda la familia (había muchísima gente en Escarpinosa, bueno, muchísima, para ser el monte, no serían más de 20 en un terreno amplísimo; cuando volví a Bilbao y me dio por salir a las fiestas, me reía de lo que consideraba masificación, ja, ja, ja). Este es el croquis y mapa de la ascensión, en linea continua el recorrido realmente realizado, y con puntos el que tenía intención de realizar antes de que cayese el chaparrón cuando estabamos en el primer ibón de Escarpinosa.

1 comentario:

  1. La próxima vez con los niños, a completar la circular y ver todos los ibones!

    ResponderEliminar